Queridos/as lectores/as:
Comparto, una vez más,
algunos microrrelatos que escribí para los retos de la página de Twitter: “Motivación escritoril”.
51. “Amanecer”
Amaneció un nuevo día y con
él una nueva era. La historia cerraba un libro y empezaba otro. Así lo
entendieron los tres Reyes Magos cuando supieron del nacimiento del Mesías.
52. “Amistad”
Un lazo rojo
Ondea al viento.
Nos busca.
Nos ata.
Un compromiso.
Una sonrisa.
Un pensamiento.
Una idea.
Un lazo rojo.
Nos guía.
Nos libera.
Inventa.
Crea
Dos vidas
Sellando la amistad.
53. “Barco”
¡Por todos los demonios,
capitán! Le aseguro que aquel barco estaba maldito. La mar estaba en calma, más
él se sacudía como si lo mecieran olas de diez metros. Vimos sombras en
cubierta. Las velas se rajaron por un viento inexistente. Murieron tres hombres…
¡Qué Dios me aleje de él!
54. “Lo sabía. Sabía que
quedaba poco tiempo…”
…para nuestra despedida. Ni
sus besos, ni sus abrazos podían aplacar el dolor que sentía en mi corazón. Los
recuerdos que tendría de nuestros encuentros no serían lo suficientemente gratificantes
para hacerme olvidar la amargura de su partida.
55. “Un paso más”.
Un paso más y llegarás a la
meta ─se dijo.
Pero sabía que no era el
final, sino el comienzo de otro episodio en la vida y seguiría siendo así hasta
que venciera el sueño eterno.
56. “Corona”
Encontrar la corona de la
emperatriz había sido su gran sueño. Se había pasado años viajando, buscando en
tiendas de antigüedades, negociando con coleccionistas. Por fin la tenía en sus
manos y sintió que su vida había acabado con el fin de la búsqueda.
57. “Sueños”
Se puede vivir en sueños
Una vida más intensa.
Llegar a sentir
Una plena felicidad.
Amar, gozar,
Y no querer despertar.
Pero la felicidad acaba
Cuando Morfeo,
Cruel divinidad,
Nos despierta
Arrastrándonos
A la cruda realidad.
58. “Los secretos del bosque”
Guarda silencio. Si te
concentras podrás descubrir los ruidos del bosque y, si escuchas con el
corazón, conocerás los secretos que guarda desde hace eones.
59. “Fortuna”.
Vivió confiando en que la
fortuna le tocaría algún día y le haría inmensamente rico. Murió sin reconocer
lo afortunado que había sido al tener una familia complaciente, comprensiva y
amante de su persona, a pesar de sus manías y excentricidades.
60. “Secreto”
En el poblado solo había una
niña que era capaz de entender el lenguaje secreto de los dragones y, por ello,
era respetada por todos.
61. “Pájaro”
La tristeza invadió la casa
una fría tarde de enero. Fue tan profundo el pesar que incluso los pájaros
huyeron del lugar.
El día que vio a un
pajarillo, amarillo y pardo, acercarse a la fuente, supo que era el momento de
revivir.
62. “Azul”
La humanidad se sorprendió cuando vio aparecer a un ser alado, de color
azul, en el cielo.
Algunos decían que era un
extraterrestre. Otros que era un ángel.
Se presentó como un dios y
nadie le creyó. Se burlaron de él.
Entonces comentó. “Aún no
estáis preparados”. Y se fue.
63. “Renacer”
La princesa siguió a los
sacerdotes y entró en la pirámide. Llegaron a una sala cuadrada, con las
paredes llenas de jeroglíficos que mencionaban sus creencias. Se metió dentro
de un sarcófago y la dejaron sola.
Tres días después, renació
como la faraona de Egipto.
64. “Dioses”
Los dioses unieron sus
fuerzas pero no fueron capaces de doblegar la voluntad del ser humano.
65. “Puerta azul”
Llegó a la dirección
indicada. Y ahí estaba, delante de la puerta azul de la foto, sin atreverse a
llamar.
Se preguntaba quién vivía
allí y cómo sería su vida si se decidía a llamar y cruzar el umbral.
De pronto, la puerta se
abrió y vio a una mujer que era exactamente igual a ella.
66. “Una buena razón”
Te voy a dar una buena razón
para que leas ese libro: te transportará a un mundo maravilloso donde viven
seres mágicos con los que compartirás aventuras y emociones increíbles.
67. “Si la profecía es
cierta…”
…nacerá una niña que tendrá
el poder de los cuatro elementos: fuego, agua, aire y tierra.
Ella unificará todos los
reinos pero será después de una cruel batalla, bajo la luna roja.
68. “Historia”
“Unificaré todas las fronteras
en un solo reino, bajo un mandato. Haré que mis súbditos se enorgullezcan de mí
y que los enemigos me teman y respeten a la vez. Ni siquiera el Dios cristiano
podrá impedir mi grandeza. Mi nombre será historia”, Genghis Khan.
69. “Casa encantada”
Tenía que reconocer que su
familia era encantadora. La madre, totalmente dedicada a cuidar de todos. El
padre, comprensivo. Los hermanos, chistosos y juguetones.
Una mañana se acordó de que
no tenía familia, así que hizo el equipaje y huyó de la casa encantada.
70. “Chocolate”
Allí estaba, en el
escaparate de la pastelería, la mejor tarta de chocolate que había visto en su
corta vida.
Apoyó su naricilla en el
frío cristal y la contempló maravillado, esperando recibir su aroma.
Alguien lo sacudió y lo
obligó a irse. Jamás podría comprar una tarta como aquella. En su mano solo
tenía unos pocos céntimos.
71. “Banco en el jardín”
La gente me miraba con
curiosidad por mi aspecto: una señora con sombrero, solitaria, en un parque.
Con el tiempo me di cuenta
de que no era lo que llamaba la atención, sino lo que estaba haciendo; y es que
yo siempre leía un libro. Y, en aquel lugar, nadie era lector.
72. “Había tenido un sueño
muy extraño. Al despertar…”
…comprobó que seguía
soñando. Intentó tranquilizarse. Pronto sonaría el despertador y acabaría el
sueño.
Pero parecía que el tiempo
no pasaba. Se despertó y, una vez más, supo que seguía soñando. Y el sueño
nunca terminaba.
73. “Imaginar una frase para
recomendar una historia de las nuestras”
En mis historias yo pongo la
magia, la aventura y el misterio. Y tú pones las emociones.
74. “Libro, gafas y vela”
Terminó la lectura y se
quitó las gafas. Contempló la vela. La suave luz parpadeante lo adormeció y
empezó a ver unas letras que bailaban en la pared. Poco a poco formaron una
palabra: Muere.
75. “Me levanté y me miré al
espejo…”
…y no me reconocí. La última
vez que había contemplado mi imagen tenía 20 años. Durante 300 años la maldición
no me permitió mirarme en un espejo. La ciencia me devolvió ese privilegio
pero, ahora, me sentía tan extraña que parecía que estaba perdiendo mi
identidad.
Espero que os hayan gustado. Nos vemos en la próxima. ¡Un saludo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario